“Hoy en la Argentina no estamos en un momento de hegemonía de algún modelo educativo, pero el punto de partida debe ser uno ético, con la educación como pilar para la construcción de una sociedad más justa”.
Así se expresó Juan Carlos Tedesco, ex ministro de Educación de la Nación (2007-2009), en el marco de una conferencia abierta organizada en conjunto por la Escuela de Política, Gobierno y Relaciones Internacionales y la Escuela de Educación de Universidad Austral, junto a la Fundación Hanns Seidel. La iniciativa responde a una sinergia entre ambas escuelas establecida con el objetivo de desarrollar diagnósticos y propuestas para mejorar la educación argentina y las políticas públicas en su conjunto.
A lo largo de su exposición, Tedesco enfatizó que “en términos cognitivos y éticos, la adhesion a la justicia es muy exigente”, y luego de preguntarse “qué experiencias educativas se pueden ofrecer para promover esta adhesión”, el licenciado en ciencias de la educación esbozó cinco líneas estratégicas educativas para lograr una sociedad más justa en el tiempo:
–Educación inicial: Educar en la etapa de hasta los 4 años es fundamental para reducir la pobreza. Esto implica la estimulación verbal y motriz, por ejemplo. Por esto es que vemos una tendencia a bajar la edad mínima de la obligatoriedad escolar.
–Docentes y el saber pedagógico: La variable clave es el docente, el que usa los insumos en los que el Estado invierte. Hoy hay enormes problemas en la formación inicial y continua de los docentes, y en los contenidos, que no se resuelven solo con plata. Hay una formación abstracta y disociada, para alumnos que ya no existen más.
–Alfabetización digital – Además de la lectoescritura, debido a la aparición de las nuevas tecnologías, hay nuevas alfabetizaciones fundamentales para que la persona pueda moverse adecuadamente en la sociedad. Hay que formar usuarios conscientes y no pasivos de los dispositivos.
–Alfabetización científica y la formación ciudadana – Necesitamos una ciudadanía reflexiva. El aborto, la manipulación genética, y el medio ambiente son debates en los que la ciudadanía debe participar. La ciencia ya no es solo para los que les gusta la ciencia.
–Políticas de subjetividad – Debemos trabajar en la expectativa de los docentes respecto a la capacidad de aprendizaje de sus alumnos, y la autoestima de los últimos. Hay que tomar responsabilidad por los resultados de los alumnos, y más cuando les va mal. Es necesaria la formación e implementación de proyectos a largo plazo: a nivel escuela, maestro y alumno, que promuevan la resiliencia.
El ex ministro también se mostró preocupado por la ausencia de la educación en la agenda pública, salvo “cuando hay paro o algún incidente de violencia en una escuela”. En ese sentido, abogó por un debate de calidad en torno a las políticas públicas: “Hoy se habla de medir, que está perfecto, pero eso solo no mejora la calidad: La pregunta es cómo enseñamos”.
Sin embargo, Tedesco destacó que “en los últimos años apareció la dimensión ética” como tendencia educativa, contrarrestando un fenómeno de “exclusion social en los 90”.
Acerca de la Universidad Austral
Con sede en la Ciudad de Buenos Aires, Pilar y Rosario, es una institución de educación superior creada por la Asociación Civil de Estudios Superiores -ACES-, entidad civil sin fines de lucro, con personería jurídica e inscripta en el Registro Nacional de Entidades de Bien Público. Destacada como la mejor universidad privada de Argentina según el Ránking QS de América Latina, la Universidad Austral promueve la investigación, imparte ensenanza de grado y postgrado, realiza programas de extensión, y brinda atención sanitaria desde su Hospital Universitario. Está constituida por las Facultades de Ciencias Biomédicas; Ciencias Empresariales; Comunicación; Derecho; Ingeniería; Hospital Universitario Austral; Parque Austral; IAE Business School; Escuela de Educación; Escuela de Política, Gobierno y Relaciones Internacionales; Instituto de Ciencias para la Familia; Instituto de Filosofía.
Fuente: www.austral.edu.ar
