Barbieri señaló que “lo que buscamos es trabajar conjuntamente sobre prácticas que tiendan a y refuercen la inclusión social. El foco estará puesto en la profesionalización de los chicos para que accedan al circuito formal de trabajo, de la economía”.
Por su parte, Caló expuso que “es un honor firmar un acuerdo con la UBA, educación de excelencia e integridad”.
El convenio prevé, además, la mutua contribución y complementación para el desarrollo institucional, incrementando la capacidad docente y desarrollando la investigación científica, tecnológica y cultural. Ambos firmantes se mostraron especialmente interesados en poner en práctica procesos de actualización de las tecnologías, para que el futuro trabajador pueda mantenerse informado y en línea con los sistemas técnicos vigentes.
La Escuela Técnica de Lugano está en el cruce de las Avenidas Roca y Escalada de Villa Lugano, y ofrece orientaciones en Técnico en Tecnologías de la Información y la Comunicación; y Técnico en Mecatrónica. El sistema de ingreso, a diferencia de las otras escuelas dependientes de la UBA, es por sorteo.
Otra característica de esta institución es que no tiene preceptores sino profesores coordinadores, que además de asistir a los alumnos en el día a día, realizan un seguimiento académico y funcionan como tutores en los llamados ‘espacios de acompañamiento’, en los que se realizan las tareas y clases de apoyo. La escuela mantiene el nivel de todas las de la UBA y abre la posibilidad de escolarización en barrios vulnerables. Es, además, el primero colegio pre universitario con la disciplina Mecatrónica.
Barbieri estuvo acompañado en la firma del acuerdo por Miguel Marzullo, rector de la Escuela Técnica; Carlos Hernández, coordinador general de la Secretaría de Hacienda y Administración, Jorge Brugnoli, asesor de decanato en la Facultad de Ciencias Económicas; y Pablo Abal Medina, asesor de rectorado.
Por la UOM, asistieron además: Roberto Bonetti, secretario general adjunto; y Agustín Pirelli, coordinador; entre otros.
Fuente: www.uba.ar