Las escuelas de oficios universitarias requieren un corto tiempo de estudio y ofrecen una salida laboral rápida, lo que despierta especial interés entre los jóvenes. Incluyen tanto propuestas de oficios tradicionales como relacionadas con las nuevas tecnologías o ligadas a las economías regionales.
Las escuelas dependientes de universidades nacionales abordan la enseñanza de oficios con el propósito de “vincular a la universidad con la formación en trabajo”, dice el director de la Escuela Universitaria de Oficios (EUO) -dependiente de la Secretaría de Políticas Sociales de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP)-, Sergio Serrichio, quien además es el impulsor de la Red Nacional de Universidades Formadoras en Oficios, integrada por más de 50 escuelas.
En las universidades públicas los oficios se aprenden con profesionales y equipamiento de primera calidad, de allí el valor de estas propuestas, explica Serrichio y señala que “el logro más grande de la Red fue conseguir que el Ministerio de Educación interviniera los certificados de muchas de las universidades”.
“Si hacemos un poco de historia, en nuestro país en los años ‘50 existían escuelas de oficio muy importantes, de las que salían profesionales capacitados, que ahora están desapareciendo por la edad”, indica Serrichio.
Pues con estas escuelas se busca volver a tener gente de oficio.
Abierta la inscripción 2024 en la UNLP
La Escuela de Oficios de la UNLP, que ya abrió la inscripción hasta el próximo 15 de diciembre, ofrece 10 cursos bajo una propuesta pedagógica bimodal que posibilita dos opciones de cursadas: una de modalidad regular/presencial, que funcionará en el Edificio de Políticas Sociales -ubicado en calle 130 y 60, Berisso- destinado a personas que residan en La Plata, Berisso y Ensenada (excepto en el caso de Asistente Administrativo Contable que se dictará en la Facultad de Ciencias Económicas); la otra de modalidad libre remota a la que se accederá a las clases en vivo o grabadas en el entorno virtual de la Escuela desde cualquier punto del país.
En ambos casos se requerirá la complementación con actividades y recursos en Aulas Web Oficios de la UNLP para la aprobación de los trayectos.
La propuesta bimodal incluye los siguientes trayectos formativos: Cuidado de personas mayores y discapacidad; Agente socio-comunitarios en cuidados de primera infancia para jardines y espacios comunitarios; Electricidad de inmuebles; Cerrajería; Auxiliar en Seguridad e Higiene Industrial; Auxiliar Asistente Administrativo-contable; Cocina; Pastelería; Auxiliar en Mecánica de Motos y Carpintería general.
Todos los cursos están destinados a mayores de 16 años, incluso para aquellos que no puedan acreditar escolaridad, y tendrán criterios de inclusión ya que será requisito estar desocupado o trabajar en la informalidad.
Con una matrícula de más de 7.000 estudiantes, el 45% de los inscriptos son jóvenes de entre 18 y 35, con igualdad en el cupo de género.
“Los jóvenes ven una salida laboral rápida y tiempo corto de estudio, con carreras que duran un año como máximo”, sostiene Serrichio.
Y subraya que “más del 50% de los egresados ya está trabajando de manera formal”.
La Universidad Barrial de la Unicen
En la Universidad Barrial, dependiente de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires (Unicen), se enseñan oficios junto con formación cultural, deportiva y artística.
“Suena raro que una universidad esté dando oficios, pero hay una realidad que no es la misma de hace 20 ó 30 años. Muchas veces no se pueden sostener carreras de siete u ocho años de duración real”, señala el director, Andrés Harispe.
La iniciativa, cuya sede se ubica en el barrio Villa Aguirre de la ciudad de Tandil, cuenta con “un sistema de cursos cortos, como diplomaturas y carreras cortas, que certifican tramos de conocimiento con instancias formativas”, explica su titular.
Entre las propuestas de cursos, se encuentran las opciones más clásicas como herrería, mecánica y carpintería, junto con aquellas áreas laborales que tuvieron mayor desarrollo en los últimos años debido al avance tecnológico, como Programación o Impresión 3D.
Adecuación a la demanda regional
Ambos directores también coinciden en que las demandas y necesidades de cada región son tenidas en cuenta a la hora de establecer una oferta de cursos relacionados con la actividad productiva local.
“Esto le brinda a cada escuela su identidad propia y permite preparar gente que puede salir a trabajar en su zona”, apunta Serrichio. En la EUO “desarrollamos un curso para operadores de armado de baterías de celdas de litio, y en la primera fábrica de la ciudad necesitaban operadores, por lo que desarrollamos contenido para capacitar a la gente que ahora está trabajando ahí”.
En cuanto a la ciudad de Tandil, Harispe enfatiza que “se trabaja con una diversidad de ofertas que tienen que ver con la composición económica de la región, como el turismo, el desarrollo de emprendimientos gastronómicos y la industria alimenticia, con productos como el chacinado y la miel”.
Estas experiencias, que se trasladan a todo el país, posibilitan la transferencia de formación a empleo a través de “la articulación con actores locales”, concluye Harispe.
Fuente: Gabriela Cerioli para www.pagina12.com.ar