Es difícil contarte,
pero ha cambiado todo:
ahora tienen miedo
estos señores con bigote y bala,
todos estos señores con cadena,
estos señores con sillón eléctrico,
esta gente tan rica,
tienen miedo.
De pronto despiertan,
corren a la ventana,
sólo es de noche afuera,
no pasa nada
pero tienen miedo,
tienen miedo de todo y, parece mentira,
también a ti te tienen miedo,
olvidado
de los Andes, también
temen a tus harapos,
y ahora recuerdan que ellos te los dieron
y tienen miedo y no comen tranquilos.
Ellos saben
que las cosas cambiaron,
y se sabe
que ahora en alguna parte
se sienta el indio
como todo el mundo,
y entra y sale y sonríe,
tiene escuela y sonrisa,
tiene pan y figura,
y eso, amigo, no sucede en el cielo,
porque en el cielo no sucede nada.
Ya se sabe,
se sabe,
que esto pasa en la tierra.