La Reforma Educativa ha tenido un pecado original sostenido, ha concebido al magisterio como un objeto a cambiar y no como un sujeto socio y responsable del cambio, con lo que se pierde el potencial y talento que el magisterio mexicano tiene, dice el reconocido investigador Manuel Gil Antón.
El también doctor en Ciencias, visitó la Laguna este fin de semana, para ofrecer su conferencia “La Reforma Educativa” dentro del programa Diálogos por la Educación que organiza el Observatorio Educativo de La Laguna.
Entrevistado en un conocido restaurante brasileño donde convivió con representantes del Observatorio, padres de familia e integrantes del Movimiento Magisterial, Manuel Gil Antón explica de una forma amena, pero reflexiva el proceso que ha significado la Reforma Educativa para el Magisterio, las debilidades de la evaluación y las consecuencias de la misma.
→ Habla de las inconsistencias en el proceso de evaluación, ¿La evaluación es idónea para los idóneos?
Una regla de oro para un proceso de evaluación es que antes de aplicarse se pruebe, y para que la evaluación se pruebe lo que se requiere es un piloteo, es decir, que se ponga previamente a prueba a su aplicación, el propio INEE ha dicho públicamente que no hubo tiempo para probar la prueba, esta evaluación no cumplió con los protocolos de prueba y por la tanto su aplicación es técnicamente inadecuada y éticamente insostenible y los resultados inciertos e injustos.
→ ¿Cuáles serán las consecuencias de esta mala evaluación?
Los resultados van a ser una manera de clasificar a las personas y clasificar a las personas como insatisfactorios, por ejemplo, es como si les pusiéramos una estrella de David en un campo de concentración Alemán, se va a estigmatizar a los maestros. Al interior de las escuelas esto lo que va a generar es una división entre los maestros,
→ ¿A nivel social?
Si el resultado no es favorable para muchos profesores, como la sociedad cree que los están evaluando bien, van a decir “ya ven como todos esos son unos iletrados, violentos, brutos y por eso la educación está mal”, la evaluación va a destruir más la imagen social del magisterio. Pero además los resultados van a ser públicos, esa es una cosa gravísima, qué respeto le va a tener un niño a un profesor, si el examen dice que el profesor reprobó, ¿con qué derecho me hace ese maestro un examen a mi alumno? todos estos son resultados de un proceso que ha confundido examinado con evaluar y que ni siquiera ha cumplido los requisitos mínimos para examinar bien.
→ ¿Se puede invalidar?
Desde mi punto de vista la autoridad máxima de la evaluación es el INEE, yo creo que lo que correspondería a ese grupo de expertos sería decir que dada las circunstancias en las que ocurrió, con la tremenda presencia policíaca en condiciones inadecuadas técnicamente y en estrés, sin haber sido probadas, lo que correspondería al INEE sería declarar nulo el proceso porque no son válidos los resultados que van a presentar.
→ Si no se hace ¿Qué puede hacer el maestro?
Los profesores tienen todo el derecho a una muy saludable indignación y creo que deben recurrir por todos los medios y maneras de expresar su inconformidad y a todos los recursos legales nacionales e internacionales que haya, es una aberración pedagógica lo que están haciendo en el nombre de la educación.
→ La Reforma continúa avanzando ¿Qué debe hacer el magisterio?
Me parece que la agenda el Gobierno ha sido clara, lo que tenemos qué hacer es mostrar como el estado mexicano ha confundido la recuperación de la rectoría de la educación con la recuperación del pacto corporativo con el SNTE, porque aunque la evaluación esté mal hecha los privilegios de los que gozan los dirigentes del SNTE siguen intocables.
→ ¿Qué opina del modelo educativo de la SEP?
Hasta donde se sabe van a presentar el modelo, los programas, los contenidos y los van a poner a consulta y otra vez, se va a decir “la escuela va a estar en el centro”, pero quién lo dice, pues la SEP. La generación de un nuevo modelo educativo tendría que ser un trabajo que surgiera del magisterio.
→ ¿Si no se frena la reforma que podemos esperar?
Me parece que lo que vamos a tener es no una reforma educativa, sino una administrativa con un gran componente laboral que promete que en varios lustros va a generar mejoras en la educación lo que es sumamente engañosos (…) lo que va a haber es un mayor control del estado mexicano del magisterio que lo va a hacer como antes lo hacía, más bien un agente electoral, un agente tranquilizador social etcétera y eso es lo más peligroso, finaliza.