Con seis horas de diferencia, el Palacio Sarmiento restituyó esta semana la condición de docente al desaparecido escritor Haroldo Conti y habilitó un pequeño acervo cultural de la pedagoga Berta Perelstein de Braslavsky, fallecida a los 95 años en el 2008.
Una noche de mediados de los setenta, los alumnos del colegio porteño Juan José Paso estrenaban profesor. Un señor desgarbado, serio, vestido con un piloto, entró al aula y se sentó en la tarima ubicada delante del escritorio: “Yo vine a enseñarles Instrucción Cívica, pero no sirve para nada. Así que si ustedes no me traicionan yo les voy a leer literatura latinoamericana y están todos aprobados”.
Aquel maestro era Haroldo Conti, más y fundamentalmente conocido como escritor. La anécdota fue relatada por el locutor Tom Lupo –uno de los estudiantes del Paso a quienes Conti les ofreció aquel trato de confidencialidad–, en el marco del acto de reparación de su legajo docente en el que la leyenda “cesante por abandono de tareas” fue reemplazada por “desaparición forzada”.
Es que el rastro de Conti se perdió en mayo de 1976, cuando el terrorismo de Estado lo desapareció por su militancia en el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT). El homenaje, que se llevó a cabo en el centro cultural que funciona en la ex ESMA y que lleva el nombre del escritor, profesor y militante, reunió a sus hijos y nietos con las autoridades educativas.
El ministro que lo cesanteó fue Juan Rafael Llerena Amadeo, que ocupó ese cargo durante la dictadura cívico-militar que encabezó el ex general Jorge Rafael Videla.
La presentación de algunos de los textos que guardó Braslavsky en su biblioteca personal (diezmada por exilios forzados) estuvo a cargo de Ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, y de la directora de la Biblioteca Nacional de Maestros, Graciela Perrone.
Asistieron además su hija, Dra. Silvia Braslavsky así como de otros familiares, discípulos y colegas, entre ellos Graciela Carbone, Beatriz Tornadú, María Del Carmen Malbrán; Andrea Molinari, el Presidente de la Academia Nacional de Educación, Dr. Pedro Barcia,y miembro de la misma Prof. Alfredo Van Gelderen, entre otros.
Sileoni agradeció la posibilidad del acceso público a la colección y agradeció a la familia Braslavsky por su gesto y su presencia. Recordó que tuvo la oportunidad de conocer a Berta y su hija Cecilia (gran educadora, quien murió en 2005 en Ginebra) exaltó su figura de “Maestra de maestros” y su profunda convicción, ya que Berta permanció fiel a sus principios y valores morales e ideológicos a lo largo de toda su intensa y fructífera vida. También mencionó el orgullo que le produce a la Biblioteca Nacional del Maestros, contar con este nuevo y rico fondo.
Perrone dijo por su parte que “una de las palabras que se asocia con bibliotecas es CONFIANZA. la confianza con que los padres dejan a sus chicos en sus salas de lectura para que puedan leer con libertad, la confianza que se deposita en los usuarios cuando los libros salen en préstamo, la confianza con que los escritores, investigadores, hombres y mujeres de la comunidad, dejan sus colecciones como legado o sus familiares lo hacen post mortem, para que lo leído vuelva a significarse en nuevas lecturas por otros lectores que descubrirán desde marginalias (lo que se escribe al margen de cada texto) hasta trozos de papel con apuntes. El legado de la Biblioteca de Berta por su familia representa esta última confianza. Y se agrega a una tradición de esta histórica biblioteca, que desde las primeras donaciones y legados generaron un valioso fondo histórico que se fundió con el natural desarrollo de las colecciones en la institución hasta la fecha.La genética de los textos que la conforman nos permitirá recorrer el singular derrotero de su construcción teórica y práctica tan innovadora para la adquisición de la lectura y la formación de los docentes”.
La coordinadora de la Sala Americana de esa biblioteca (donde se puede acceder al materia) Dra. Ana Diamant describió a Berta desde sus roles como mujer, militante y educadora: “Traer a Berta a la memoria es recordar que su última aparición pública fue en esta misma biblioteca, cuando apagó sus 95 velitas ovacionada por 400 bibliotecarios escolares. Y recordar también cómo le firmó a cada uno de ellos, con dedicatoria personalizada el libro que recupera su trayectoria personal e individual.Mirar el fondo bibliográfico y documental Berta Braslavsky, que hoy se abre definitivamente a la comunidad, es encontrarse ante un juego de espejos que reflejan recíprocamente tramos de su vida y libros y manuscritos que dan cuenta de ellos.Así se pueden identificar influencias e interpelaciones en personas, tiempos, lugares, instituciones y militancias que encuentran su referente en los estantes y en las cajas de archivo. Por eso es fácil presentar un fondo que con tanta diversidad se trama en la coherencia de su larga vida y en la lealtad a sus propias ideas, que muestra la traza de enseñante, investigadora, autora e interpeladora de otros autores.”
La doctora Silvia Braslavsky, quien vive en Alemania hace casi cuarenta años, reveló que “esto es sólo una pequeña parte de la biblioteca de mamá, que sufrió mudanzas a casas de familiares y amigos en cada uno de los exilios”. Agradeció al Ministerio de Educación de la Nación y a varios de los discípulos de Berta la tarea empeñada en clasificar esos textos, alentando la esperanza que sirva para las futuras generaciones.
El fondo Berta Braslasky está conformado por:
- 1156 libros en diferentes lenguas, sobre pedagogía, política educativa y fundamentalmente temas de alfabetización, lecto escritura, métodos de enseñanza, enseñanza de la lectura y concepciones sobre la infancia.
- 19 cajas de archivo que contienen manuscritos, textos inéditos, correspondencia con colegas, artículos periodísticos, seguimiento de tesitas, planificaciones de clases, conferencias dictadas, apuntes de ideas
- Memorias de eventos académicos en los que participó
- Documentos de base que contaron con sus aportes: propuestas curriculares, diseño de planes, campañas de alfabetización y de lectura
- Documentos de experiencias en las que participó
Fuente: www.bnm.me.gov.ar