Con impulso del Ministerio de Ciencia, fue presentado el Centro de Estudios en Ciencia, Tecnología e Innovación.
Las universidades nacionales de Quilmes y de General Sarmiento, junto a la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), encararán en conjunto una serie de estudios sociales, económicos y políticos sobre la ciencia, la tecnología y la innovación en Argentina. Lo harán a través del nuevo Centro Interdisciplinario de Estudios en Ciencia, Tecnología e Innovación (Ciecti), recién presentado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación, impulsor del proyecto. El objetivo será generar, a demanda del sector público y de la sociedad, conocimientos y análisis para nutrir el diseño, implementación y evaluación de las políticas orientadas a la innovación. La institución también pretende funcionar como una plataforma interdisciplinaria que articule los aportes de la academia, el Estado y las empresas.
“Estamos sumergidos en un mundo cada vez más cambiante, con problemas con el acceso a recursos energéticos, alimenticios, al agua… Esto interpela al sistema científico y genera la necesidad de desarrollos tecnológicos para responder a distintas problemáticas. Argentina no es ajena a esto”, dijo a Página/12 la secretaria de Planeamiento y Políticas del ministerio, Ruth Ladenheim, para abordar el contexto en el que se decidió crear el Ciecti.
La iniciativa surgió luego de un concurso público donde se convocó a la presentación de proyectos. Ganó un consorcio constituido por Flacso y las universidades de Quilmes y General Sarmiento, las que hoy trabajan en esta iniciativa que, según Ladenheim, “está bastante avanzada y la expectativa es lanzarla en 2015”. Mientras, se vienen realizando estudios a través de equipos de investigadores compuestos por economistas, sociólogos y politólogos.
Algunos de estos grupos ya trabajan en las experiencias de los consorcios público-privados que ha impulsado el Ministerio de Ciencia en estos años, mientras que otros investigadores se enfocaron en las políticas de ciencia y tecnología y en la necesidad de adaptarlas a las distintas características de las diversas ramas industriales.
“Después de siete años de gestión es un momento de hacer un balance. Después de esta asociatividad que generamos entre lo público y lo privado, entre lo científico y tecnológico, entre los objetivos productivos y los sociales, es hora de analizar lo realizado”, sostuvo Ladenheim. Así, por ejemplo, se realizarán análisis de impacto en algunos de los consorcios que financia el ministerio para fomentar el desarrollo productivo. Los estudios buscarán analizar qué pasó en el sector en estos años, si se crearon empleos estables y con qué calificaciones, si las empresas invirtieron en investigación y en de-sarrollo y cuánto, si lograrán exportar, entre otras cosas. Todo esto también apunta a ver cómo incidió la creación de esos consorcios en algunas de las localidades –seleccionadas por estar especialmente alejadas de los centros de producción tradicionales– y cómo hacer para replicar este modelo a nivel nacional.
El Ciecti no dependerá del Ministerio de Ciencia más que en la financiación. “Miramos ejemplos internacionales y nos dimos cuenta de que en el mundo hay instituciones que trabajan cerca de los ministerios de Ciencia y Tecnología, pero que son independientes. No forman parte de la gestión”, dijo la funcionaria.
Las tareas del centro también incluirán otros campos que pertenecen a las ciencias sociales, como la economía del conocimiento o el impacto social de las tecnologías, además de la evaluación de las políticas públicas sobre ciencia e innovación y un monitoreo del avance tecnológico en el mundo. “Esta institución combina la realización de estudios con un espacio de diálogo público-privado. La concebimos como un lugar muy vinculado con el resto del sistema científico”, resaltó Ladenheim.
El principal objetivo será lograr que el sistema científico tecnológico en su totalidad –centros de investigación y universidades– responda “a las necesidades cambiantes y a las demandas sociales y productivas”.
Mientras el Ciecti se pone en funcionamiento, la Secretaría de Planeamiento y Políticas ya convocó a universidades y centros de investigación a la presentación de proyectos en distintas líneas, como el análisis de las políticas en países emergentes, las actividades de investigación y desarrollo y transferencias entre las casas de estudio y el sector productivo, la promoción de las vocaciones científicas, el impacto de las nuevas tecnologías en la educación y las innovaciones para el desarrollo sustentable, entre otras. Al cierre de la convocatoria se presentaron 150 iniciativas. Con el financiamiento de la cartera de Ciencia, los proyectos se pondrán en marcha durante el verano y deberán concluirse hacia junio de 2015.
Fuente: Aldana Vales para www.pagina12.com.ar