EL NÚMERO 50 DEL DOSSIER “LA EDUCACIÓN EN DEBATE” DE UNIPE PLANTEA UNA PREGUNTA CRUCIAL: ¿SIRVE REPETIR EL SECUNDARIO?
En este nuevo dossier que la Universidad Pedagógica (UNIPE) publica dentro de la edición de mayo/17 de Le monde diplomatique, las autoras Mariela Julia Hernández y Florencia Maderna Negrín, investigadoras de UNIPE, lanzan al ruedo la polémica sobre uno de los nudos de la escuela secundaria que es necesario analizar y desatar para poder producir un cambio positivo.
La repitencia es un fenómeno educativo que abarca alrededor del 10% de la población de la escuela secundaria en Argentina y se mantuvo relativamente estable en los últimos quince años, tanto a nivel nacional como en la Provincia de Buenos Airees.
A pesar de que se la defiende –como a otras formas remanentes de la escuela de pasado-, los pedagogos coinciden en sus efectos negativos sobre las trayectorias de los estudiantes y en el desperdicio de recursos que implica para las escuelas.
El artículo cita a otros investigadores que coinciden en el cuestionamiento, entre ellos Axel Rivas y Belén Sánchez que aseguran: “La repetición, tarde o temprano, anuncia un fracaso y predice la expulsión de los alumnos sin llegar al final del camino esperado. […] La idea de repetir todo de nuevo es costosa en términos de la inversión pública, reduccionista en términos pedagógicos y poco efectiva en sus resultados”.
O la actual funcionaria del Ministerio de Educación en el área de evaluación, Elena Duro, que en 2007, en un informe de UNICEF, afirmó: “Pedagógicamente, la repetición se basa en una serie de premisas equivocadas: que el estudiante que no aprendió […] aprenderá si toma exactamente el mismo camino por segunda vez […]; que nada se aprendió a lo largo del proceso y […] es necesario empezar todo de nuevo […]; que el conocimiento y el aprendizaje operan en una dimensión lineal […] y son el resultado de la ejercitación repetitiva. Socialmente, la repetición refuerza el círculo vicioso de las bajas expectativas, el bajo rendimiento, la baja autoestima y el fracaso escolar”.
En los adolescentes, afirman las autoras, la repitencia genera fuertes desánimos, autoculpabilización y, en muchos casos, aleja del saber.
Hernández y Maderna sostienen que “en un contexto de obligatoriedad de la escuela secundaria, resulta imperioso desnaturalizar la noción de la repitencia escolar” y proponen otra organización basada en la experiencia de nuevos formatos educativos que se llevaron adelante en la provincia de Buenos Aires y en la decisión reciente de la provincia de Río Negro de eliminar la repitencia.
Fuente: www.unipe.edu.ar
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