l primer año de Javier Milei: consecuencias devastadoras para la Ciencia y Tecnología. Caídas históricas en salarios y presupuestos. Las decisiones presupuestarias y las políticas implementadas por el gobierno del ultraderechista están hundiendo a este sector clave para el desarrollo del país.
En apenas un año de gestión, el gobierno de Javier Milei marcó un antes y un después en el sistema de Ciencia y Tecnología en Argentina, pero no para bien. Las decisiones presupuestarias y las políticas implementadas por el gobierno del ultraderechista están hundiendo al sector, un área clave para el desarrollo del país, afectando no solo a los investigadores y profesionales, sino también a las posibilidades de construir un futuro competitivo y sostenible.
Según un análisis del Grupo de Estudios sobre Política Científica (EPC), en colaboración con el Centro Interdisciplinario de Investigaciones en Ciencia, Tecnología e Innovación (CIICTI), el impacto de estas políticas fue devastador, mostrando cómo los recortes presupuestarios afectaron cada rincón del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SNCTI).
, la línea de ejecución teórica debería rondar el 87,8% del total del crédito asignado. La ejecución de la FCyT continúa alejándose cada vez más de esa línea, situándose ahora a más de 6 puntos por debajo de la misma (81,6%), producto de una cada vez más marcada sub-ejecución. (Imagen::Grupo de Estudios sobre Política Científica)
Recortes históricos y sus consecuencias inmediatas
La reducción del presupuesto destinado a la función de Ciencia y Tecnología (CyT) es alarmante. Este sector ahora representa apenas el 0,216% del PBI, un descenso del 30,5% respecto a 2023 y el nivel más bajo desde 1972. Con menos recursos, la capacidad para hacer investigaciones, innovar tecnológicamente y formar nuevas generaciones de científicos se vio (gravemente) limitada. Este escenario afecta directamente el presente y retrasa el avance en áreas clave como la salud, la educación y el desarrollo industrial.
La ejecución acumulada en los primeros once meses del año continúa mostrando un continuo deterioro en la comparación interanual. (Imagen:Grupo de Estudios sobre Política Científica)
En términos salariales, la situación también es crítica. Los trabajadores del sector científico-tecnológico sufrier
Subsidios y federalización: políticas paralizadas
Desde diciembre de 2023, la inversión en proyectos y subsidios de investigación cayó un 61,2% en términos reales, dejando a numerosos programas sin el financiamiento necesario para operar. Además, los programas destinados a federalizar el acceso a la ciencia, como “Construir y Equipar Ciencia”, ejecutaron solo el 0,002% de los créditos disponibles, lo que paralizó la expansión del desarrollo científico más allá de los grandes centros urbanos.
La ejecución presupuestaria de los programas educativos cayó, en promedio, 45,3% interanual. Se destacan paralizaciones, como en el FONID y en Conectar Igualdad, y caídas abruptas como en Infraestructura y Equipamiento, Jardines de Infantes, Formación Tecnológica y Becas. (Imagen:Grupo de Estudios sobre Política Científica)
Universidades y empleo: un sistema en crisis
La educación superior, que históricamente fue un bastión del conocimiento en Argentina, también sufrió un duro revés. El presupuesto ejecutado para las universidades nacionales cayó un 33,1% en términos reales, afectando directamente la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías.
La evolución real de corto plazo de los sueldos muestra que en un año de gestión, y suponiendo una inflación del 2,9% en noviembre, los sueldos CIC-CPA del CONICET han caído un 30,0% en términos reales.
En el ámbito laboral, la pérdida de 2.696 puestos de trabajo en el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SNCTI) refleja un sector en retroceso. Desde diciembre de 2023, no se registraron ingresos a la Carrera del Investigador en el CONICET, una situación que amenaza con vaciar de talento y experiencia a las instituciones científicas del país.
El impacto en el futuro
La ciencia y la tecnología no son solo una inversión presente, sino la clave para el futuro. Los recortes y el abandono de estas áreas comprometen seriamente las posibilidades locales de competir en un mundo cada vez más tecnologizado. Sin innovación, el país pierde terreno en sectores como la industria, la salud y el cuidado ambiental, perpetuando la dependencia económica y limitando las oportunidades para las próximas generaciones.
Fuente: Natalia López Gómez para www.pagina12.com.ar
