El secundario en cifras

Es hora de incrementar la cantidad de jóvenes que completan el nivel secundario, según un informe elaborado por el CENTRO DE ESTUDIOS DE LA EDUCACIÓN ARGENTINA, que dirige el economista Alieto Aldo Guadagni.
EL NIVEL SECUNDARIO EN CIFRAS En este boletín, la primera nota es presentada por Edgardo Zablotsky, miembro de la Academia Nacional de Educación y Rector de la Universidad del CEMA, la cual se titula “Del ingreso irrestricto a la frustración masiva: hora de apostar a la educación dual”. El autor menciona que la Ley 27.204 sancionada en octubre del 2015 desalienta cualquier instancia de evaluación que incentive un ingreso universitario con bases sólidas, dando como resultado muchos estudiantes con escasa preparación y sin esfuerzo alguno, y pocos graduados. Frente a ello, propone la implementación del sistema de educación dual desarrollado en Alemania y adoptado por varios países europeos, que combina la formación teórica en instituciones educativas con una capacitación práctica intensiva en empresas, destacando los resultados obtenidos y un ejemplo ilustrativo de la contracara de la Argentina donde una empresa no pudo cubrir vacantes laborales por no encontrar jóvenes con el secundario completo. Concluye en que “la verdadera inclusión no se logra negando las dificultades, sino ofreciendo caminos diversos y valiosos para que todos los jóvenes puedan construir su proyecto de vida. Apostar por la educación dual no implica renunciar a la universidad, sino reconocer que no todos los caminos deben pasar por ella”.
Posteriormente, Guillermina Tiramonti investigadora de Flacso Argentina. Miembro de la Coalición por la Educación y del Club Político, expone su nota “Sobre el Gobierno de la Educación”, en la cual descri be las consecuencias de la descentralización de la prestación de la educación y la creación del Consejo Federal de Educación (CFE), expresando, además, “el derrumbe de los resultados educativos de nuestro país en relación con el resto de los logros de los países de la región muestra a las claras que el sistema no funciona debidamente”. También, destaca las últimas resoluciones del CFE y cuestiona “en qué medida los cuerpos burocráticos de las provincias están en condiciones de procesar positivamente los compromisos que han adquirido a partir de estas resoluciones”, concluyendo que “habría que incursio nar en la búsqueda de un mecanismo que obligue a las provincias a mejorar la calidad de sus cuerpos administrativos”. Finalmente, el licenciado Francisco Boero, subdirector del CEA, presenta su nota titulada “Evolución de la matrícula y egresados del nivel secundario”. Analiza las cifras correspondientes a la evolución y composición según el sector de gestión de la matrícula y la cantidad de egresados del nivel secundario a partir de la información publicada por el Ministerio de Educación en sus Anuarios Estadísticos, contemplando el período 2007-2023 y 2007-2022, respectivamente (últimas cifras publicadas). Posteriormente, presenta un análisis de la relación entre los ingresantes en el nivel secundario en 2017 y los egresados en 2022. Por último, realiza una comparación a partir de información publicada por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) en su último informe Education at a Glance 2024, donde presentan información sobre 47 países, incluida la Argentina y otros de América Latina y el Caribe, considerando el porcentaje de la población de 25 a 64 años de edad y de 25 a 34 años según el máximo nivel educativo alcanzado tomando como referencia el nivel secundario. Cuando se estaba preparando la edición final de este boletín, las autoridades educativas nacionales dieron a conocer los preocupantes resultados del Operativo Aprender del nivel secundario. La evolución del nivel de desempeño en matemática muestra un grave deterioro. Los resultados nacionales del año 2024 indican que el 55 por ciento de los estudiantes de quinto y sexto año tienen un desempeño “por debajo del nivel básico”. Este indicador negativo viene ascendiendo año a año desde el 2016.
DEL INGRESO IRRESTRICTO A LA FRUSTACIÓN MASIVA: HORA DE APOSTAR POR LA EDUCACIÓN DUAL Por Edgardo Zablotsky, Miembro de la Academia Nacional de Educación y Rector de la Universidad del CEMA. En octubre de 2015 se sancionó la Ley 27.204, la cual introdujo una serie de modificaciones a la Ley 24.521 de Educación Superior, vigente desde 1995, lo que convirtió a la Argentina en un caso singular: una legislación que desalienta cualquier instancia de evaluación que incentive un ingreso universitario con bases sólidas. La ley establece que: “Todas las personas que aprueben la educación secundaria pueden ingresar de manera libre e irrestricta a la enseñanza de grado en el nivel de educación superior. (…) Este ingreso debe ser complementado mediante los procesos de nivelación y orientación profesional y vocacional que cada institución de educación superior debe constituir, pero que en ningún caso debe tener un carácter selectivo excluyente o discriminatorio”. Alieto Guadagni, Miembro de la Academia Nacional de Educación, subrayó lo lamentable de esta decisión: “Es una paradoja, porque mientras más fácil se hace el ingreso, más difícil es egresar”. Es claro que tiene razón; resulta habitual ingresar a nuestras universidades con escasa preparación y sin esfuerzo alguno. El fracaso es previsible, nuestro país tiene proporcionalmente muchos más estudiantes universitarios que México, Colombia, Chile y Brasil, pero muchos menos graduados debido a la gran deserción. ¿No sería más razonable implementar una evaluación al final del secundario que incentive el estudio a lo largo de esa etapa? Todas las naciones europeas lo han hecho. En Francia, por ejemplo, el examen fue instaurado por Napoleón a comienzos del siglo XIX. También lo hacen países tan disímiles como Japón, Corea, Cuba, Israel, Ecuador, Vietnam, Chile, Costa Rica, Colombia, México, Siria, China, Argelia, Brasil, entre muchos otros. ¿De verdad creemos que el resto del mundo está equivocado y solo nosotros tenemos razón? La realidad dice otra cosa: la deserción masiva lo demuestra con crudeza. Modificar la Ley 27.204 permitiría evitar que miles de jóvenes pierdan años de su vida en trayectorias que no concluirán, cuando podrían estar formándose para desempeñarse en oficios cada vez más demandados por nuestra sociedad. Pocas políticas resultan tan regresivas como condenar al fracaso a quienes solo necesitan una oportunidad concreta. ¿Por qué en lugar de ello no generar las condiciones para que quienes no planean continuar una carrera universitaria, o no están en condiciones de hacerlo, egresen de la escuela secundaria con una formación que les brinde oportunidades reales en el mundo del trabajo? En mayo de 2018, invitado por la Fundación Friedrich Naumann, visité varias ciudades alemanas y pude comprobar in situ las virtudes de su sistema educativo dual. Este modelo permite que alrededor de dos tercios de los estudiantes secundarios que no siguen la vía universitaria concluyan sus estudios con una capacitación técnica de calidad, que facilita su incorporación efectiva al mercado laboral. A mi regreso, publiqué en Infobae una nota titulada, “Es posible enfrentar con éxito la crisis educativa”, proponiendo la adaptación del mismo, el denominado sistema de educación dual alemán, a nuestra realidad, la cual se caracterizaba por una alta deserción de la escuela secundaria y por el hecho que miles de jóvenes, muchos de los cuales habían terminado su educación obligatoria, no estudiaban ni trabajaban. Por cierto, dicha propuesta la he venido realizando en diversas columnas de opinión a partir de 2015. El sistema de educación dual, desarrollado en Alemania y adoptado por varios países europeos, combina la formación teórica en instituciones educativas con una capacitación práctica intensiva en empresas. A lo largo de los últimos años del secundario, los estudiantes que eligen esta modalidad alternan entre el aula y el lugar de trabajo, donde aprenden oficios y habilidades técnicas directamente en el entorno productivo. Con el tiempo, el peso de la formación práctica aumenta, permitiendo que los jóvenes se familiaricen con los procesos, la cultura y las exigencias del mundo laboral real. Al egresar, muchos son contratados por las mismas empresas donde se formaron, ya que no sólo dominan los conocimientos específicos de su profesión, sino que también han adquirido experiencia concreta y competencias sociolaborales fundamentales para su inserción exitosa. En Alemania existen alrededor de 350 profesiones con una duración de 2 a 3,5 años. Usualmente los estudiantes perciben durante este período un salario próximo a un tercio del que percibe un trabajador al inicio de su vida laboral. Por supuesto, las empresas participantes, alrededor del 80% de las cuales pertenecen al sector privado, cuentan con incentivos fiscales del gobierno federal y/o estatales. El sistema se encuentra reglamentado por la Ley de Formación Profesional y cuenta con el apoyo de los sindicatos. Austria, Luxemburgo, Suiza, Noruega y Bélgica utilizan también esquemas similares. Un caso ilustrativo de nuestra realidad, tan distinta a la alemana, ocurrió en agosto de 2021, cuando Toyota Argentina, pese a ofrecer salarios superiores al promedio del mercado, no logró cubrir 200 puestos operativos en su planta de Zárate-Campana. ¿El obstáculo? La dificultad para encontrar jóvenes con secundario completo en la región. Como señaló Mariano Narodowski, esto refleja una realidad estructural: en sectores vulnerables, completar la escuela secundaria sigue siendo una barrera crítica. La demanda laboral concreta estaba ahí, pero la formación mínima necesaria, no. Es una señal clara de que el sistema educativo no está generando el capital humano básico que el país necesita para desarrollarse. La verdadera inclusión no se logra negando las dificultades, sino ofreciendo caminos diversos y valiosos para que todos los jóvenes puedan construir su proyecto de vida. Apostar por la educación dual no implica renunciar a la universidad, sino reconocer que no todos los caminos deben pasar por ella. Reformar el sistema educativo para incorporar trayectos técnicos y laborales de calidad es, hoy, una necesidad impostergable. No hacerlo es condenar a cientos de miles de jóvenes al desencanto, a la frustración y, en muchos casos, a la marginalidad. Es hora de abandonar la retórica vacía y construir una escuela secundaria que habilite futuros reales. Sólo así podremos hablar, con honestidad, de inclusión.
SOBRE EL GOBIERNO DE LA EDUCACIÓN Por Guillermina Tiramonti, investigadora de Flacso Argentina. Miembro de la Coalición por la Educación y del Club Político. Hace más de 30 años, en 1992 para ser precisa, la argentina descentralizó totalmente la prestación de la educación y el Consejo Federal de Educación, creado en 1989, pasó a ser el órgano coordinador de los subsistemas provinciales. El proceso de descentralización se fundamentó en la idea de acercar la gestión a las instituciones donde se plasma el hecho educativo. La investigación había ya demostrado que la estructura burocrática no trasladaba, como había pensado Weber, el mensaje desde la cúpula a la base. Entre uno y otro extremo se desplegaba una serie de intereses que, a modo de teléfono descompuesto, tergiversaban lo planeado por la cúpula. No sabemos si el paso de las responsabilidades a las provincias estuvo inspirado en estas comprobaciones o se trataba de la aplicación de un modelo económico que prescribía una distribución hacia bajo de los gastos sociales. El hecho es que en los más de 40 años que llevamos de democracia muestran que no solo no bajan los planes, sino que tampoco lo hacen las leyes. También, sabíamos en el 92 que las gestiones provinciales, excepto algunas excepciones, eran técnicamente muy débiles. Esta situación sigue siendo así aún hoy. Los allegamientos partidarios o personales son el criterio usado para la selección del personal de los integrantes de las administraciones locales, lo que explica porque no han podido, en todos estos años, formar técnicamente al personal local. El derrumbe de los resultados educativos de nuestro país en relación con el resto de los logros de los países de la región muestra a las claras que el sistema no funciona debidamente. En todos estos años ninguna de las condiciones estructurales que nos llevaron al declive se han podido modificar, por el contrario parecieran haberse agravado. No hemos podido generar una carrera docente que establezca los incentivos necesarios para atraer mejores aspirantes y pautar trayectorias basadas en la capacitación y el mérito. Han proliferado los institutos de formación docente de la más heterogénea calidad, sin que hayamos instituido un mecanismo adecuado de evaluación y acreditación como hemos podido hacer con la Coneau para las universidades. Tampoco hemos concretado un sistema nacional para el registro de los datos educativos que son necesarios para hacer un seguimiento adecuado de su funcionamiento. Finalmente, las innovaciones que se llevan a cabo no pasan de ser proyectos piloto que afectan solo a un grupo de escuelas de las diferentes localidades sin que se hayan logrado cooperaciones o acuerdos interprovinciales. Las últimas evaluaciones han demostrado una clara ineficacia en la enseñanza de la lengua y la matemática. En este segundo caso el 85% de los alumnos del último año de la secundaria no alcanzan los niveles básicos de conocimiento en la materia y en lengua este dato es del 42%. Algunas de las jurisdicciones han comenzado a aplicar programas especiales para procesar las ineficiencias en la enseñanza de la lecto-escritura y actualmente participan de un programa nacional de alfabetización. Es interesante observar que estas acciones no son llevadas adelante por el personal técnico local sino por ONG y prestigiosos especialistas de orden nacional. No estamos hablando de asesoramiento o adopción de sistemas creados por investigadoras de estos temas, sino de tercerización de la aplicación de los proyectos. Es de esperar que estos dejen instaladas capacidades técnicas a nivel local. Al mismo tiempo muchas localidades han iniciado procesos de transformación escolar, fundamentalmente del nivel secundario, y para realizarlos han generado lo que se ha dado en llamar “redes educativas” que constituyen una instancia que articula horizontalmente a las escuelas y sus agentes para procesar en conjunto las problemáticas que afectan a sus instituciones y colaborar para la implementación de los programas de transformación de un nivel educativo que reclama cambios urgentes. A diferencia de la pirámide burocrática que deposita la posibilidad de cambio en una cadena de mando la red juega sus posibilidades de éxito en una instancia de colaboración horizontal. Las redes han sido ya aplicadas en distintos países como Chile y Francia, mostrando su efectividad para producir mejoras en distintas dimensiones de la vida escolar. 1 Cabe preguntarse sobre la acción del Consejo Federal de Educación que debe hacerse cargo de consensuar políticas nacionales destinadas a generar condiciones para que el sistema ajuste su funcionamiento de modo de revertir su ineficacia e introducir las innovaciones necesarias en un contexto de cambio cultural profundo. Si analizamos la producción del CFE en lo que corre del gobierno de La Libertad Avanza, nos encontramos con una producción que bien podría aportar cambios significativos en las condiciones estructurales del sistema. Hago mención solo algunas de ellas que aportan en este sentido. − La resolución 475/25 en la que se establecen los lineamientos curriculares para la formación docente inicial de todos los niveles del sistema. Es un documento destinado a orientar, con mucha precisión y aportes relevantes de diferentes especialistas del tema, la elaboración de los currículos provinciales de las diferentes instituciones de formación docente de las diferentes localidades. − La resolución 494/25 que establece como estará compuesta la Base Nacional Homologada dentro del sistema integral de formación (SiNIDE) que resulta ser un instrumento de información del sistema que hace más de 10 años que se está en proceso de elaboración. − La resolución 483/24 instituye el “Sistema Federal Integrado de Evaluación, Certificación y Acreditación de la formación docente (SiFIECA) y establece que el Instituto Nacional de Formación Docente (INFOD) será responsable de la gestión y funcionamiento de este instituto. Sin duda se trata de acuerdos relevantes para el futuro del Sistema Educativo. La pregunta es en qué medida los cuerpos burocráticos de las provincias están en condiciones de procesar positivamente los compromisos que han adquirido a partir de estas resoluciones. Todas ellas importan un trabajo técnico y político de importancia, que hasta ahora muchas de las jurisdicciones parecieran no tener. 1Para consultar las experiencias de redes educativas ver Sandra Ziegler (2025), Educar en Red. Ed Siglo XXI. En definitiva, habría que incursionar en la búsqueda de un mecanismo que obligue a las provincias a mejorar la calidad de sus cuerpos administrativos. No hay provincia en el país que no cuente con universidades que puedan instituirse en el semillero con el cual alimentar el aparato político de un cuerpo de administradores con formación básica suficientemente sólida como para incorporar positivamente capacitaciones puntuales sobre los temas a tratar. Por supuesto que también habría que contar con cambios en los mecanismos de reclutamiento de personal de los estamentos políticos locales para que sean estos y no otros los accedan a los cargos de responsabilidad dentro de los aparatos burocráticos. EVOLUCIÓN DE LA MATRÍCULA Y EGRESADOS EN EL NIVEL SECUNDARIO Por Francisco Boero, subdirector del Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA) de la Universidad de Belgrano. En el presente artículo se analizan las cifras correspondientes a la evolución y composición según el sector de gestión de la matrícula y la cantidad de egresados del nivel secundario a partir de la información publicada por el Ministerio de Educación en sus Anuarios Estadísticos, contemplando el período 2007-2023 y 2007-2022 respectivamente (últimas cifras publicadas). Posteriormente, se presenta un análisis de la relación entre los ingresantes en el nivel secundario en el año 2017 y los egresados en el año 2022.
Finalmente, se realiza una comparación a partir de información publicada por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) en su último informe Education at a Glance 2024, donde presentan información sobre 47 países, incluida la Argentina y otros de América Latina y el Caribe, considerando el porcentaje de la población de 25 a 64 años de edad y de 25 a 34 años según el máximo nivel educativo alcanzado tomando como referencia el nivel secundario. Comenzando por los principales indicadores de matrícula y egresados del nivel secundario correspondientes a la media nacional, se observa que durante el período 2007-2023 la matrícula total del nivel secundario ha incrementado un 26,8 por ciento, pasando de 3.205.880 a 4.065.695 de alumnos. Dicho crecimiento fue casi similar en ambos sectores de gestión ya que en el sector de gestión estatal fue del 27,3 por ciento y en el sector de gestión privada fue del 25,6 por ciento. Por su parte, la cantidad de alumnos en el primer año del nivel secundario presentó un crecimiento total del 2,5 por ciento, sin embargo hay grandes diferencias según el sector de gestión ya que en el sector estatal disminuyó un 1,7 por ciento, mientras que en el sector privado incrementó un 15,8 por ciento. La cantidad de egresados presentó un crecimiento mucho mayor que la matrícula, alcanzando durante el período 2007-2022 una evolución del total de egresados del 78,8 por ciento, la cual se traduce en 195.639 graduados más en 2022 que los correspondientes al 2007. Al mismo tiempo, en el sector de gestión estatal dicho aumento fue del 95,0 por ciento, mientras que en el sector de gestión privada fue del 56,1 por ciento (Cuadro I). Cuadro I Indicadores de matrícula y egresados del nivel secundario según sector de gestión, período 2007-2023 Indicador Sector de gestión 2007 Matrícula total nivel secundario 2023 Δ% Estatal 2.281.433 2.904.198 27,3% Privada 924.447 1.161.497 25,6% Total 3.205.880 4.065.695 26,8% Estatal 598.684 588.358 -1,7% Matrícula 1er año nivel secundario Privada 191.454 221.675 15,8% Total 790.138 Egresados nivel secundario Estatal 810.033 2,5% 144.698 282.122 (2022) 95,0% Privada 103.698 161.913 (2022) 56,1% Total 248.396 444.035 (2022) Fuente: elaboración propia a partir de Anuarios Estadísticos del Ministerio de Educación. 78,8% Tal como se observa en el Cuadro II, al analizar la evolución de la matrícula total del nivel secundario comparando las jurisdicciones del país, se observa que la evolución ha sido desigual entre las mismas y según el sector de gestión. Durante el período 2007-2023, Santiago del Estero es la provincia con mayor crecimiento de la matrícula total alcanzando un 58,2 por ciento, seguida por Misiones con un 44,1 por ciento y por San Juan con un 41,2 por ciento. En el otro extremo se encuentran las jurisdicciones que menor crecimiento de matrícula total reportaron, comenzando por Catamarca (3,1 por ciento), Formosa (4,3 por ciento) y Ciudad de Buenos Aires (7,8 por ciento). Al mismo tiempo, dentro de las provincias con crecimientos desiguales según sector de gestión, se destacan La Rioja, La Pampa, Chaco, Neuquén, Formosa, Catamarca y CABA en donde la matrícula privada creció notablemente más que la estatal y que, en algunos casos, esta última presenta decrecimientos, como así también existen provincias donde ocurrió lo contrario, es decir, la matrícula estatal creció considerablemente más que la privada como en San Luis, Tucumán, Santiago del Estero y Buenos Aires. Cuadro II Evolución de la matrícula total del nivel secundario, período 2007-2023 Gestión estatal División territorial Gestión privada Total 2007 2023 Δ% 2007 2023 Δ% Santiago del Estero 36.287 2007 58.590 61,5% 12.965 19.306 48,9% 49.252 2023 Δ% Misiones 52.775 73.974 40,2% 17.471 27.285 56,2% 70.246 101.259 44,1% San Juan 45.312 63.238 39,6% 12.453 18.323 47,1% 57.765 81.561 41,2% 77.896 58,2% Buenos Aires Resto 340.495 481.184 41,3% 131.417 174.739 33,0% 471.912 655.923 39,0% San Luis 31.548 44.993 42,6% 5.601 6.490 15,9% 37.149 51.483 38,6% Santa Cruz 19.827 27.456 38,5% 3.313 4.604 39,0% 23.140 32.060 38,5% Buenos Aires 845.927 1.174.309 38,8% 403.754 518.066 28,3% 1.249.681 1.692.375 35,4% Conurbano 505.432 693.125 37,1% 272.337 343.327 26,1% 777.769 1.036.452 33,3% Río Negro 38.471 49.955 29,9% 9.297 13.184 41,8% 47.768 63.139 32,2% Chubut 40.365 51.413 27,4% 6.515 9.312 42,9% 46.880 60.725 29,5% Neuquén 40.633 51.088 25,7% 5.585 8.630 54,5% 46.218 59.718 29,2% Total País 2.281.433 2.904.198 27,3% 924.447 1.161.497 25,6% Mendoza 95.042 120.023 26,3% 26.779 33.923 26,7% 121.821 153.946 26,4% Tierra del Fuego 10.628 3.205.880 13.505 27,1% 3.755 4.644 23,7% 14.383 4.065.695 26,8% 18.149 26,2% La Pampa 23.086 27.901 20,9% 5.503 7.229 31,4% 28.589 35.130 22,9% La Rioja 23.083 27.174 17,7% 3.224 4.900 52,0% 26.307 32.074 21,9% Córdoba 170.014 208.603 22,7% 116.705 138.102 18,3% 286.719 346.705 20,9% Tucumán 93.572 115.014 22,9% 39.315 44.520 13,2% 132.887 159.534 20,1% Santa Fe 147.578 177.017 19,9% 69.307 82.215 18,6% 216.885 259.232 19,5% Chaco 77.400 82.240 6,3% 9.149 19.816 116,6% 86.549 102.056 17,9% Salta 86.965 102.754 18,2% 20.973 24.021 14,5% 107.938 126.775 17,5% Entre Ríos 82.775 96.160 16,2% 27.144 32.481 19,7% 109.919 128.641 17,0% Corrientes 79.225 89.475 12,9% 16.648 18.667 12,1% 95.873 108.142 12,8% Jujuy 51.900 56.932 9,7% 8.930 10.793 20,9% 60.830 67.725 11,3% Ciudad de Buenos Aires 99.516 102.939 3,4% 88.338 99.591 12,7% 187.854 202.530 7,8% Catamarca 33.990 33.436 -1,6% 6.540 8.844 35,2% 40.530 42.280 4,3% Formosa 55.514 56.009 0,9% 5.183 6.551 26,4% 60.697 Fuente: elaboración propia a partir de Anuarios Estadísticos 2007 y 2019 del Ministerio de Educación. 62.560 Con respecto a la evolución de la matrícula del primer año del nivel secundario, se observa que esta es inferior a la correspondiente a la matrícula total, al mismo tiempo que se observan grandes diferencias entre provincias y según sector de gestión. Tal como se mencionó anteriormente, en el Cuadro III se pone de manifiesto que durante el período 2007-2023 el incremento fue del 2,5 por ciento, pero nuevamente este promedio nacional encubre grandes diferencias entre las provincias, destacándose Santiago del Estero, que en 2023 presentó un 33,9 por ciento más de alumnos en el primer año del secundario que en 2007, seguida por Misiones y San Juan, con incrementos del 27,5 y 15,8 por ciento respectivamente. Por su parte, al analizar la evolución de la matrícula del primer año del nivel secundario según el sector de gestión, se observa que en algunas jurisdicciones se desarrollan diferentes evoluciones. En el sector de gestión estatal son quince las jurisdicciones que vieron disminuida la cantidad de alumnos en el primer año, dentro de las cuales la CABA presenta el mayor retroceso con -22,1 por ciento, seguida por Río Negro (-21,4 por ciento), Catamarca (-18,8 por ciento) y La Rioja (-18,2 por ciento). Mientras que en el sector de gestión privada, en todos los casos menos en San Luis (-4,4 por ciento) la misma es positiva, destacándose los casos de Chaco, La Pampa, La Rioja, y Misiones. Cuadro III Evolución de la matrícula de primer año del nivel secundario, período 2007-2023 Gestión estatal División territorial Gestión privada Total 3,1% 2007 2023 Δ% 2007 2023 Δ% Santiago del Estero 11.783 2007 2023 Δ% 15.676 33,0% 3.252 4.453 36,9% 15.035 20.129 33,9% Misiones 17.219 20.817 20,9% 4.254 6.565 54,3% 21.473 27.382 27,5% San Juan 10.910 12.307 12,8% 2.562 3.295 28,6% 13.472 15.602 15,8% Salta 23.248 26.360 13,4% 5.430 5.650 4,1% 28.678 32.010 11,6% Buenos Aires Resto 84.386 88.644 5,0% 25.187 31.365 24,5% 109.573 120.009 9,5% Formosa 11.748 12.669 7,8% 1.144 1.326 15,9% 12.892 13.995 8,6% Corrientes 17.366 18.727 7,8% 3.440 3.656 6,3% 20.806 22.383 7,6% Chubut 9.306 9.609 3,3% 1.302 1.714 31,6% 10.608 11.323 6,7% Buenos Aires 210.052 214.912 2,3% 77.840 92.247 18,5% 287.892 307.159 6,7% Conurbano bonaerense 125.666 126.268 0,5% 52.653 60.882 15,6% 178.319 187.150 5,0% San Luis 7.827 8.175 4,4% 1.076 1.029 -4,4% 8.903 9.204 3,4% Total País 598.684 588.358 -1,7% 191.454 221.675 15,8% Entre Ríos 19.848 19.877 0,1% 5.765 5.947 3,2% 25.613 25.824 0,8% Córdoba 41.285 39.340 -4,7% 22.799 25.016 9,7% 64.084 64.356 0,4% 790.138 810.033 2,5% Mendoza 28.436 27.503 -3,3% 6.571 7.372 12,2% 35.007 34.875 -0,4% Santa Cruz 5.419 5.100 -5,9% 780 1.033 32,4% 6.199 6.133 -1,1% Chaco 23.410 20.413 -12,8% 2.324 4.786 105,9% 25.734 25.199 -2,1% La Pampa 5.442 4.810 -11,6% 773 1.240 60,4% 6.215 6.050 -2,7% Neuquén 12.943 12.094 -6,6% 1.473 1.895 28,6% 14.416 13.989 -3,0% Tucumán 25.060 22.912 -8,6% 7.236 8.234 13,8% 32.296 31.146 -3,6% Tierra del Fuego 2.426 2.202 -9,2% 758 823 8,6% 3.184 3.025 -5,0% Santa Fe 45.729 39.137 -14,4% 17.085 17.299 1,3% 62.814 56.436 -10,2% Catamarca 7.522 6.139 -18,4% 1.162 1.623 39,7% 8.684 7.762 -10,6% Ciudad de Buenos Aires 26.691 20.799 -22,1% 19.529 20.251 3,7% 46.220 41.050 -11,2% La Rioja 6.763 5.533 -18,2% 669 1.057 58,0% 7.432 6.590 -11,3% Jujuy 15.047 12.872 -14,5% 2.130 2.334 9,6% 17.177 15.206 -11,5% Río Negro 13.204 10.375 -21,4% 2.100 2.830 34,8% 15.304 Fuente: elaboración propia a partir de Anuarios Estadísticos 2007 y 2019 del Ministerio de Educación. 13.205 En el Cuadro IV se analiza la cantidad de alumnos graduados de escuelas secundarias argentinas en 2022 y su composición según sector de gestión. En dicho año, egresaron del nivel secundario 444.035 alumnos, de los cuales el 63,5 por ciento lo hizo en escuelas de gestión estatal y el 36,5 por ciento restante en escuelas de gestión privada. Al comparar detalladamente la composición de los egresados secundarios en cada una de las provincias argentinas se observa que la situación es muy dispar en diferentes jurisdicciones tal como ocurre con la composición de la matrícula. En Formosa, La Rioja, San Luis, Chubut y Neuquén, más del 80 por ciento de los graduados secundarios egresó de escuelas estatales, en tanto que el sector privado graduó menos del 20 por ciento de la totalidad. En el otro extremo, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, las escuelas privadas gradúan muchos más estudiantes secundarios que las estatales, mientras que en Córdoba ambos sistemas hacen lo propio prácticamente con la misma proporción. Cabe destacar que Buenos Aires, Santa Fe, CABA y Córdoba gradúan, en conjunto, al 71 por ciento del total de los egresados de colegios secundarios privados del país. Cuadro IV Cantidad de egresados del nivel secundario y composición según sector de gestión, año 2022 División territorial Formosa Total egresados nivel secundario 2022 5.658 Gestión estatal Gestión privada Egresados % Egresados % 4.797 84,8% La Rioja 861 San Luis 15,2% 5.103 4.314 84,5% 789 15,5% 6.377 5370 84,2% 1007 15,8% Chubut 6.557 5393 82,2% 1164 17,8% Neuquén 6.071 4.862 80,1% 1.209 19,9% Santa Cruz 3.249 2.560 78,8% 689 21,2% Corrientes 11.576 9.061 78,3% 2.515 21,7% Jujuy 7.866 6.086 77,4% 1780 22,6% Catamarca -13,7% 4.673 3.591 76,8% 1082 23,2% Chaco Salta La Pampa San Juan 12.205 9.122 74,7% 3.083 25,3% 14.473 10.629 73,4% 3.844 26,6% 3.550 2.600 73,2% 950 26,8% 8.543 6.203 72,6% 2.340 27,4% Mendoza 17.905 12.665 70,7% 5.240 29,3% Santiago del Estero 10.184 7.063 69,4% 3.121 30,6% Buenos Aires Resto 73.759 49.644 67,3% 24115 32,7% Entre Ríos Tierra del Fuego Misiones 12.824 8.530 66,5% 4.294 33,5% 1.859 1.225 65,9% 634 34,1% 10.856 7.076 65,2% 3.780 34,8% Tucumán 16.768 10.871 64,8% 5.897 35,2% Río Negro 5.450 3.463 63,5% 1.987 36,5% Total País 444.035 282.122 63,5% Buenos Aires 161.913 36,5% 186.914 116.077 62,1% Conurbano 70.837 37,9% 113.155 66.433 58,7% 46.722 41,3% Santa Fe 24.268 12.828 52,9% 11.440 47,1% Córdoba 33.459 17.084 51,1% 16.375 48,9% Ciudad de Buenos Aires 27.647 10.652 Fuente: elaboración propia a partir de Anuario Estadístico 2019 del Ministerio de Educación. 38,5% 16.995 61,5% Al evaluar la cantidad de alumnos que ingresaron al primer año de la secundaria en 2017 y cumplieron el nivel secundario en 2022, es decir considerando 6 años de extensión en promedio, recordemos que la estructura académica puede ser de 6 años de primaria y 6 años de secundaria o bien 7 años de primaria y 5 de secundaria según cada jurisdicción (ver nota al pie de Cuadro V), para la media del país se observó que, de los 867.149 estudiantes que comenzaron primer año en 2017, sólo el 51,2 por ciento (444.035 alumnos) finalizó el colegio secundario seis años después en 2022. Esta cifra es muy distinta si el estudio se realiza por sistema de gestión, ya que las escuelas secundarias de gestión privada graduaron el 70,6 por ciento de los alumnos que iniciaron su escolaridad secundaria en 2017, mientras que en el sector de gestión estatal lo hizo el 44,2 por ciento. El análisis también difiere cuando se consideran las provincias, observándose por ejemplo, que en La Rioja culminaron el ciclo secundario en el tiempo esperado el 69,1 por ciento de los alumnos seguida por San Luis con el 63,2 por ciento y CABA con el 60,3 por ciento, en tanto que en Santa Fe esa cifra fue de apenas el 36,0 por ciento, Río Negro 36,6 por ciento y Misiones 37,4 por ciento. Si además prestamos atención a las cifras relativas a los diferentes sistemas de gestión, notaremos que, en todas las jurisdicciones, las escuelas de gestión privada muestran una mayor relación entre graduados secundarios 2022 e ingresantes a primer año secundario 2017, respecto de las escuelas de gestión estatal (Cuadro V). Cuadro V Relación entre ingresantes de primer grado nivel secundario 2017 y egresados nivel secundario 2022 División territorial Gestión Estatal Gestión Privada Total 1er grado secundaria (2017) Egresados secundaria (2022) Relación 1er grado secundaria (2017) Egresados secundaria (2022) Relación 1er grado secundaria (2017) Egresados secundaria (2022) Relación La Rioja 6.432 4.314 67,1% 954 789 82,7% 7.386 5.103 69,1% San Luis 8.815 5.370 60,9% 1.273 1.007 79,1% 10.088 6.377 63,2% Ciudad de Buenos Aires 23.789 10.652 44,8% 22088 16995 76,9% 45.877 27.647 60,3% Tierra del Fuego 2.219 1.225 55,2% 873 634 72,6% 3.092 1.859 60,1% Buenos Aires Resto 90.929 49.644 54,6% 32.270 24.115 74,7% 123.199 73.759 59,9% Buenos Aires 220.862 116.077 52,6% 101.030 70.837 70,1% 321.892 186.914 58,1% Conurbano 129.933 66.433 51,1% 68.760 46.722 67,9% 198.693 113.155 56,9% Mendoza 25.657 12.665 49,4% 6.527 5.240 80,3% 32.184 17.905 55,6% Chubut 10.546 5.393 51,1% 1341 1164 86,8% 11.887 6.557 55,2% Catamarca 7.221 3.591 49,7% 1.453 1.082 74,5% 8.674 4.673 53,9% La Pampa 5.270 2.600 49,3% 1.572 950 60,4% 6.842 3.550 51,9% Total País 637.824 282.122 44,2% 229.325 161.913 70,6% 867.149 444.035 51,2% Tucumán 25.164 10.871 43,2% 7.814 5.897 75,5% 32.978 16.768 50,8% San Juan 13.942 6.203 44,5% 3.225 2.340 72,6% 17.167 8.543 49,8% Córdoba 42.516 17.084 40,2% 25049 16375 65,4% 67.565 33.459 49,5% Corrientes 20.258 9.061 44,7% 3.808 2.515 66,0% 24.066 11.576 48,1% Santiago del Estero 16.839 7.063 41,9% 4.537 3121 68,8% 21.376 10.184 47,6% Jujuy 14.000 6.086 43,5% 2575 1780 69,1% 16.575 7.866 47,5% Neuquén 11.276 4.862 43,1% 1.529 1.209 79,1% 12.805 6.071 47,4% Entre Ríos 22.891 8.530 37,3% 5.983 4.294 71,8% 28.874 12.824 44,4% Chaco 24.469 9.122 37,3% 3843 3083 80,2% 28.312 12.205 43,1% Salta 29.174 10.629 36,4% 5.615 3.844 68,5% 34.789 14.473 41,6% Formosa 13.459 4.797 35,6% 1.242 861 69,3% 14.701 5.658 38,5% Santa Cruz 7.479 2.560 34,2% 1113 689 61,9% 8.592 3.249 37,8% Misiones 23.969 7.076 29,5% 5.075 3.780 74,5% 29.044 10.856 37,4% Río Negro 12.381 3.463 28,0% 2.519 1987 78,9% 14.900 5.450 36,6% Santa Fe 49.196 12.828 26,1% 18.287 11.440 62,6% 67.483 24.268 36,0% Fuente: elaboración propia a partir de Anuarios Estadísticos 2014 y 2020 del Ministerio de Educación. Nota: en el último Anuario Estadístico 2023 se aclara que las jurisdicciones de CABA, Chaco, Jujuy, La Rioja, Mendoza, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, Santa Cruz, Santa Fe y Santiago del estero presentan estructura académica de 7 años nivel primario y 5 años nivel secundario; y las jurisdicciones de Buenos Aires, Catamarca, Córdoba, Corrientes, Chubut, Entre Ríos, Formosa, La Pampa, San Juan, San Luis, Tierra del Fuego y Tucumán presentan estructura académica de 6 años nivel primario y 6 años nivel secundario. En el siguiente Cuadro VI se contemplan las cifras correspondientes al informe “Education at a Glance 2024” publicadas por la OCDE. Al comparar los datos que exponen el porcentaje de la población de 25 a 64 años de edad según el máximo nivel educativo alcanzado sobre un total de 47 países incluidos en el informe, se observa que los primeros cinco con mayor porcentaje de la población con nivel secundario o superior presentan valores superiores al 92 por ciento, siendo liderado por República Checa, República Eslovaca y Polonia que alcanzan el 94 por ciento. Con respecto a los siete países de América Latina y el Caribe incluidos en el listado, todos se encuentran por debajo del promedio de la OCDE, que es del 81 por ciento, siendo Chile el primer país latinoamericano con el 75 por ciento, seguido por Argentina con el 68 y Perú con el 65 por ciento, ocupando los puestos 33, 34 y 36 del listado respectivamente. En el extremo inferior se encuentra India en donde apenas el 25 por ciento de la población ha alcanzado al menos el nivel secundario completo, le siguen China (37 por ciento) e Indonesia (43 por ciento), como así también ocurre que dentro de los últimos cinco países del listado se encuentran México y Costa Rica con el 44 y 45 por ciento respectivamente. Por su parte completan el grupo de países latinoamericanos Colombia y Brasil con el 63 y 61 por ciento respectivamente, ocupando los lugares 38 y 39 del listado. Cuadro VI Porcentaje de la población de 25 a 64 años de edad según máximo nivel educativo alcanzado, año 2023. Cifras en porcentaje (%). País Inferior a nivel Secundario completo (%) 1) República Checa 6 Nivel Secundario completo o superior (%) 2) República Eslovaca 94 3) Polonia 4) Corea 5) Canadá Promedio OCDE 33) Chile (2022) 34) Argentina 6 6 7 7 19 25 32 94 94 93 93 81 75 36) Perú 68 34 38) Colombia 65 39) Brasil 43) Costa Rica 44) México 45) Indonesia (2022) 46) China (2020) 47) India 37 40 54 56 57 63 75 63 61 45 44 43 37 25 Fuente: elaboración propia a partir de OCDE, Education at a Glance 2024. Nota: el total podría no sumar el 100% en los promedios debido a la falta de datos para algunos niveles en ciertos países. En el mismo informe mencionado anteriormente, la OCDE también publica el porcentaje de la población de 25 a 34 años según el máximo nivel educativo alcanzado y género, de un total de 46 países. En este caso vemos que los 5 primeros países del listado presentan valores superiores a los del anterior Cuadro VI, con cifras superiores al 94 por ciento de la población cuyo máximo nivel educativo alcanzado es al menos el secundario completo, siendo liderado por Corea con el 99 por ciento, seguido por Croacia con el 97 por ciento. En cuanto a los países de América Latina y el Caribe, se observa que Chile conserva el valor más alto con un 89 por ciento, al mismo tiempo que se encuentra por encima del promedio de la OCDE (87 por ciento) ocupando el lugar 20 del listado. Mientras que Perú y Colombia son los que le siguen con el 79 y 78 por ciento y ocupando los lugares 35 y 36 respectivamente. Argentina presenta un 73 por ciento de la población de 25 a 34 años que al menos ha finalizado el secundario y ocupa el lugar 40 de la lista, si bien en este grupo etario presenta un valor mayor que en el analizado anteriormente como lo han hecho todos los países latinoamericanos, ha sido superada no sólo por Perú y Colombia sino que también por Brasil (74 por ciento). Al final del listado se encuentra India con el 39 por ciento, seguida por Sudáfrica e Indonesia, mientras que México y Costa Rica completan los últimos 5 lugares del listado con el 58 y 62 por ciento respectivamente (Ver Cuadro VII). Cuadro VII Porcentaje de la población de 25 a 34 años de edad según género y máximo nivel educativo alcanzado, año 2023. Cifras en porcentaje (%). País Inferior a nivel Secundario completo Nivel Secundario completo o superior Hombres Mujeres Promedio Hombres Mujeres Promedio 1) Corea 2 1 2 98 99 99 2) Croacia 3 3 3 97 97 97 3) Canadá 6 4 5 94 96 95 4) Irlanda 6 4 5 94 96 95 5) Polonia 6 4 5 94 96 95 20) Chile (2022) 13 10 12 87 90 89 Promedio OCDE 15 12 14 85 88 87 35) Perú 20 23 22 80 77 79 36) Colombia 25 18 22 74 82 78 39) Brasil 30 23 27 70 77 74 40) Argentina 30 22 26 69 77 73 42) Costa Rica 41 36 39 59 64 62 43) México 42 42 42 58 58 58 44) Indonesia (2022) 42 43 43 58 57 58 45) Sudáfrica 47 41 44 53 60 57 46) India 57 65 61 43 35 39 Fuente: elaboración propia a partir de OCDE, Education at a Glance 2024. Nota: el total podría no sumar el 100% en los promedios debido a la falta de datos para algunos niveles en ciertos países. CONCLUSIONES La matrícula de nuestro nivel secundario ha crecido como así también lo ha hecho notablemente la cantidad de egresados de este nivel educativo, sin embargo es necesario que éste crecimiento sea equitativo y no se distinga ni por provincias ni por el nivel socio económico de nuestros estudiantes, y se eliminen las diferencias manifestadas en estos indicadores, principalmente en lo que respecta a la cantidad de estudiantes que comienzan y culminan el nivel secundario en el tiempo esperado, además de garantizar la calidad de su nivel de conocimiento. De esta manera se producirá un importante avance hacia la justicia social y la igualdad de oportunidades, favoreciendo así la disminución de nuestra pobreza. Al mismo tiempo, si mejoramos nuestros niveles de finalización del nivel secundario en comparación a los países del resto del mundo y de América Latina y el Caribe, nuestros jóvenes estarán mejor posicionados frente a las nuevas demandas de conocimiento y empleos globales asociadas a los avances científicos y tecnológicos de los últimos años.
Fuente: www.ub.edu.ar

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