Cada vez hay más universitarios que eligen no asistir a clases y buscar los contenidos de las materias en plataformas digitales, ubicar a los autores en las redes sociales, bajarse clases por streaming o tomar datos de explicaciones por Youtube por lo que los docentes buscan alternativas para hacer atractiva una clase “en vivo” y que “no se vayan” en medio de la materia. “Llega la mitad de la cursada y nos preguntamos cuantos inscriptos hay y comienza allí un arduo trabajo militante para terminar con la misma cantidad de alumnos ya que se van de a muchos en medio de la carrera. Y en está tarea no nos está yendo bien”, dijo Mariana Maggio profesora de Tecnología Educativa de la Carrera de Ciencias de la Educación de la Facultad de Filosofía y Letras (UBA). En tanto, otra profesora de la Facultad de Farmacia y Bioquímica aseguró que cerca de los finales de los 50 inscriptos sólo vienen 20 a escuchar las clases y esto para un docente que despliega su investigación en una clase “es muy duro”. También una profesora de la facultad de Arquitectura y Diseño manifestó lo difícil que le resultaba hacer atractiva una clase en vivo cuando la estructura docente determina que una persona es la que sabe la disciplina y es la encargada de transmitirla a los alumnos. “Hay que reconocer que el conocimiento cambia y los estudiantes cambiaron, entonces porque hay que preguntarse seguimos haciendo lo mismo en nuestras clases” se planteó Maggio durante la charla “La enseñanza universitaria en discusión.Las clases re-concebidas en ambientes de alta disposición tecnológica” organizadas por el programa de Educación a Distancia de la UBA. En este sentido apuntó que “desde la agenda de los medios se afirma que la enseñanza universitaria, tal como la conocemos, va a desaparecer. Tenemos que transformar las prácticas de enseñanza para hacer más rica y poderosas las clases en vivo”. Maggio aseguró que “frente a una realidad que indica los libros que se expanden en las redes, los autores de los que hablamos hacen interpretaciones en plataformas digitales, las explicaciones acabadas hay que ponerlas en video o en general ya la pusieron otros en Youtube, hay que construir una nueva didáctica para las clases en vivo”. La profesora. quien es autora de un proyecto de investigación sobre esta temática en la misma facultad en la que da clases, aseguro que “no estamos frente a un cambio instrumental, estamos frente a un cambio de era y ante ello los docentes no debemos hacer lo mismo en una clase en vivo aunque nos haya gustado ya que la realidad varía todo el tiempo y los conocimientos también” “Tampoco hay que dejar librado la enseñanza a lo individual, hay que enseñar con otros, planificar las clases en forma colectiva, imaginarlas con los estudiantes, escucharlos, construir acuerdos, tirar temas a la basura ya que no se pueden dar 400 temas en un año y concebir la enseñanza sin que esté direccionada por la evaluación”, enumeró Maggio como propuestas para atraer a los estudiantes a las clases. Precisó además que “hay una forma de consumo que se instala que es el “on demand” que busca aprender los conocimientos en cualquier momento, a su propio ritmo y en el lugar mas placentero, frente a ello nos planteamos que es lo que va a quedar como experiencia en vivo, que es lo queda ahora de nuestras clases”. “Queda lo que ocurre fuera del espacio del aula, las interacciones que van más allá de la clase, con las redes sociales, la mejor expresión de un investigador, su análisis y despliegue, la respuestas espontáneas, las charlas divergentes y las situaciones inmersivas que nos involucren emocionalmente”, destacó la docente. Sostuvo que por estas razones las clases en vivo “es algo que no queremos perder” y destacó: ” En el ‘on demand’ toda experiencia puede ser anticipada, la experiencia de la clase tiene que ser algo vivo, única, poderosa” para el alumno. Añadió que en la educación a distancia “los alumnos piden experimentar una clase en vivo y en la educación presencial, los estudiantes exigen el “on demand”. Frente a ello, la docente destacó sni embargo que”si una clase se transmite por streaming, no van a ser muchos los alumnos que asistan a la experiencia en vivo si no están obligados a hacerlo” y remarcó: “Muchos estudiantes, unos días antes de los exámenes, buscan en Youtube las mismas explicaciones que se dieron en las clases en vivo”. “Por eso pensamos colocar las clases en dos planos que es lo que va a suceder en el vivo y que va a estar en el on demand” detalló la docente y aseguró que esta discusión”se da en un momento complejo de la universidad”. “Hay que garantizar la igualdad de oportunidades y que los alumnos terminen el nivel con la posibilidad de insertarse en el mundo laboral y profesional, por lo que hay que generar propuestas que respondan a esa igualdad y a esa justicia social”, indicó Maggio. FUENTE: WWW.TELAM.COM.AR
Basta de deberes
Los fines de semana de noviembre, los estudiantes españoles harán una “huelga de deberes”. El reclamo surgió de los propios padres, hartos de la cantidad de tarea que maestros y profesores les mandan a sus hijos. Organizados en la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (Ceapa), aseguran que la actividad escolar en las casas, además de ser ineficaz como método educativo, les consume gran parte del tiempo durante los sábados y domingos, y no les permite disfrutar de la familia o hacer actividades recreativas. “En la Escuela falta una asignatura: mi tiempo libre”, es el título que tiene la campaña de la Ceapa, una red que representa a unos 12.000 de los más de 18.000 establecimientos públicos del país, que propone para los fines de semana de noviembre actividades alternativas para los chicos de primaria, secundaria y bachiller, en lugar de hacer los deberes: hablar de temas de actualidad, visitar museos o solo disfrutar los ratos de tranquilidad con la familia. “Llevamos muchos años intentando concientizar sobre lo injusto, ineficaz y contraproducente que es la existencia de los deberes escolares”, expresa la carta abierta de la Ceapa que convoca a la huelga, dirigida a los padres y madres del alumnado, a los docentes y a la sociedad. A continuación, en la carta argumentan: “Tiempos y métodos que en países que consiguen mejores resultados educativos (Finlandia o Alemania, por ejemplo) hace tiempo que ya tienen adoptados y que les permiten educar mejor, enseñar mejor y respetar a la vez los derechos de los menores. En sus países han puesto en el centro de la educación al alumnado y eso se nota”. José Luis Pazos, presidente de la Ceapa, sostiene que hay un problema de fondo con la educación en España, todavía muy apegada al método tradicional de memorización. Parte en su crítica del “absoluto convencimiento de que los deberes están siendo perjudiciales” para los niños, al dificultar su desarrollo integral más allá de los conocimientos puramente académicos. Luego argumentó que en una sociedad en la que es tan fácil acceder a infinidad de datos, “lo que les tenemos que enseñar a los niños no es a que memoricen, sino a gestionar la información, a ser críticos, a seleccionar lo que vale y lo que no vale, y lo que necesitan en su día a día”, a lo que agregó que “la sociedad ha cambiado profundamente a su alrededor, pero el ambiente en el aula no”. Según la edición 2012 del informe PISA de educación, elaborado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), España es el quinto país, de un total de 38 estudiados, con la mayor carga de deberes para los alumnos después de Rusia, Italia, Irlanda y Polonia, con 6,5 horas a la semana frente a una media de 4,9. El mismo informe sostiene que esas carga horaria no se traduce en un mejor rendimiento de los alumnos, a los que este estudio da tradicionalmente una puntuación mediocre en matemáticas, lectura y ciencia. En cambio, en países como Finlandia y Corea del Sur, en donde la media de deberes a la semana es inferior a tres horas, los resultados están dentro de los más destacados del informe. Una de las consecuencias que sacó la OCDE en 2014 a raíz de estos estudios indica que la carga de deberes “no suele estar relacionada con el rendimiento global del sistema escolar”. La Ceapa elaboró justificantes para las familias e instrucciones para reclamar ese tiempo libre en los colegios e institutos. Propone entregar cada lunes “una nota en el centro educativo que explique los motivos por los que los deberes escolares se han quedado sin hacer, en todo o en parte, si ello se ha producido”. Sugiere, siempre que sea posible, hacerlo directamente en la escuela y no a través de los hijos e hijas, salvo que ellos quieran. Por otro lado, recomienda hablar directamente con los docentes que “den una negativa” y acordar con ellos “el volumen de los mismos de forma que puedan quedar resueltos en la tarde del viernes, de forma que quede preservado el fin de semana”. Surgida en 1979, la Ceapa se formó con el objetivo de representar a aquellos padres y madres que demandan la mejora de la educación pública y la universalización de la educación obligatoria y gratuita. Al encabezar distintas luchas por la educación a lo largo de los años, se convirtió en el interlocutor principal de los padres y madres ante el Ministerio de Educación en sus negociaciones sobre las acciones y políticas en el sistema educativo. Sin embargo, la “huelga de deberes” que iniciarán este fin de semana y continuarán durante noviembre no tiene precedentes en el país. Se trata de la segunda fase de la campaña que se inició en octubre, y se basó en dar a conocer la problemática, sensibilizar y concientizar más a toda la sociedad, además de dar herramientas a padres y madres para que pudieran hablar con docentes de sus hijos e hijas. “Desde Ceapa, así como desde las federaciones y confederaciones que se integran en la misma, vamos a realizar todo tipo de iniciativas para dialogar con los representantes del profesorado, de forma que entiendan perfectamente el objetivo de la campaña y la asuman también como propia”, sostuvieron al presentar la campaña. Fuente: www.pagina12.com.ar
Evaluación si, evaluación no
La educación argentina viene siendo objeto de fuerte atención en las últimas semanas a causa del operativo de medición de resultados. Este operativo desató un amplio debate que no se corresponde con la naturaleza de los problemas que enfrentamos en la educación primaria y secundaria. La Argentina mide resultados desde hace muchos años. Aplicamos dispositivos internacionales (OCDE/PISA), regionales latinoamericanos (Unesco/Serce), nacionales (ONE) y, en algunas jurisdicciones, se aplican mediciones locales. Muchas de las críticas al actual dispositivo se podrían aplicar a todos estos instrumentos vigentes en la década pasada. Sin duda hay que seguir midiendo y mejorando los instrumentos que utilizamos en la medición, pero con la información disponible es mucho lo que se puede hacer. El problema no es medir, sino mejorar los resultados. El debate debería estar concentrado en estrategias para la enseñanza y el aprendizaje de la lectura y la escritura, de las matemáticas y las ciencias exactas y naturales, de los valores ciudadanos que promuevan adhesión a la democracia y a la justicia social. Nos debemos un serio debate acerca de la formación, carrera y las condiciones de trabajo de los docentes, que son la clave para políticas de mejora de la calidad. Asimismo deberíamos estar discutiendo públicamente la transformación de la escuela secundaria, las estrategias para la educación inicial obligatoria o las políticas para la incorporación de las tecnologías de la información. El sobreactuado debate sobre la medición oculta la urgencia de estos otros debates sobre los cuales ya tenemos información suficiente o sobre las orientaciones de la actual política educativa. Resulta llamativo el silencio acerca del artículo que publicó el ministro de Educación hace unas semanas en el diario Clarín, donde postula la necesidad de terminar con propuestas de parches para el sistema educativo y dar un salto revolucionario hacia un modelo diferente, sugerido a través de la metáfora del “Falcon” y la “nave espacial”. Más allá de la discutible metáfora, el punto más inquietante de su propuesta se refiere a las condiciones necesarias para dar ese salto: mayores inversiones privadas e inversiones extranjeras en educación. El artículo, en realidad, termina donde debería haber empezado. ¿Qué significa mayor inversión privada? ¿Será en desmedro de la inversión estatal? ¿Será orientada a la formación profesional o a la educación en general? ¿Qué significa inversores extranjeros en educación? ¿Compraremos paquetes enlatados de recursos didácticos para que los apliquen nuestros docentes? Si se trata de inversores, buscarán tasas de retorno atractivas. ¿Pondremos el lucro como pauta para el financiamiento de la educación? No hay dudas de que la escuela y la educación necesitan cambios profundos. Pero la ausencia de un debate serio sobre estas transformaciones viene de lejos y no se soluciona con esloganes y discursos retóricos de defensa de la escuela pública. Gran parte de las ideas de transformación ya está en los proyectos de los educadores más progresistas de nuestra historia. Podemos volver a leer a Cousinet, Montessori, Washburne o Freinet. No se trata de sentimientos nostálgicos, sino de entender las razones por las que esas ideas no lograron penetrar en los sistemas educativos, particularmente en los segmentos del sistema al que acceden los sectores sociales más desfavorecidos. Las razones no son sólo pedagógicas, sino políticas. Insisto: no hay dudas acerca de la necesidad de adoptar una política renovada de innovaciones educativas, exigida por el cambio en el papel del conocimiento en los procesos productivos y por el impacto de la globalización sobre la cultura y el desempeño ciudadano. Pero se necesitan cambios sistémicos que democraticen la capacidad de desarrollar innovaciones, particularmente aquellas destinadas a romper el determinismo social de los resultados de aprendizaje. Abrir el debate sobre estos temas es necesario incluso para saber qué deberíamos medir en los operativos de evaluación. Si queremos mejorar los resultados a través de un sistema educativo basado en escuelas bien equipadas, maestros formados y con adecuadas condiciones de trabajo, diseños curriculares comunes elaborados con participación de los actores sociales involucrados, modelos de organización institucional que requieran el trabajo en equipo y mayores niveles de responsabilidad por los resultados, deberíamos medir variables muy distintas a las que mediríamos si queremos abandonar ese sistema y avanzar hacia un terreno desconocido donde el riesgo es que no solucionemos los problemas actuales y provoquemos otros de mayor complejidad. Fuente: www.lanacion.com.ar
Cuba, un ejemplo
“La educación cubana es un ejemplo para el mundo”, declaró a la Agencia Cubana de Noticias el representante de la Oficina regional de Cultura para América Latina y el Caribe de la Unesco, Miguel Jorge Llivina Lavigne, durante el Congreso Internacional Universidad. Recordó también que Cuba tiene un Índice de Desarrollo de la Educación para Todos muy elevado, incluso si se compara con los países desarrollados. El índice considera la calidad, la primera infancia, la primaria, los jóvenes, la alfabetización de los adultos y la paridad entre los sexos. Según este índice, Cuba ocupa el primer lugar entre todos los países latinoamericanos, incluyendo México o Venezuela. Dicho índice permite evaluar el nivel global de la implementación de los objetivos de la iniciativa de la Unesco ‘Educación para Todos’, lanzada en el año 2000. De acuerdo con el último informe de la iniciativa, Cuba ocupa también el primer lugar entre los países con ingresos bajos que más gastan en educación. El representante de la Unesco destacó también los programas educativos cubanos ‘Educa a tu hijo’ y ‘Yo sí puedo’, que los isleños implementan en América Latina y los países caribeños y cuyo objetivo principal es combatir el analfabetismo y proveer educación a todos. Fuente: actualidad.rt.com
Cambios, de a poco
Claudia Bracchi, integrante del Comité Pedagógico del Encuentro Nacional “Voces y Sentidos para Transformar la Secundaria” acerca sus muy interesantes reflexiones sobre los cambios que la escuela secundaria debe enfrentar. Perspectivas que se apoyan en mirar y repensar dos cuestiones muy importantes: La repitencia y el mérito. Recomendamos su lectura atenta. Fuente: www.transformarlasecundaria.org | https://drive.google.com/open?id=0ByFBpf0I-wMJVXVmX24tVl9iZGs
Científica, a los 13 años
Se llama Maanasa Mendu y, a sus 13 años, acaba de ser convertirse en la estadounidense más joven en desarrollar energía renovable. Pero lo más destacable de la proeza de esta adolescente es que el invento que ha creado permite hacer la energía solar y eólica muy asequible: producirlo tan sólo cuesta US$5. Su ingenio le ha valido el primer premio del concurso de jóvenes talentos científicos de EE.UU. Discovery Education 3M Young Scientist Challenge,valorado en US$25.000. La joven le contó a la BBC qué le inspiró a desarrollar su dispositivo y cómo funciona. Energía vibratoria “El dispositivo captura energía que está constantemente disponible en nuestro entorno -como energía vibratoria generada por el viento- para generar energía limpia”, explicó la joven en el programa Newsday de la BBC. Lo que quizás no sabías de la electricidad El aparato se llama “Harvest” (cosecha) y funciona a través a unas “hojas solares” que son capaces de obtener energía de las precipitaciones, el viento y el sol, gracias a unas pequeñas celdas solares. Al principio, su idea era enfocarse únicamente en la energía eólica, pero con ayuda de su mentora, la ingeniera Margaux Mitera, descubrió que podría aprovechar también otro tipo de energía natural. Esa energía vibracional se transforma en energía renovable gracias a un material piezoeléctrico que va conectado al aparato. La instalación es bastante rudimentaria, pero logra su objetivo de producir energía limpia de forma muy económica. Las plantas que “dieron luz” a los poblados de la selva amazónica en Perú La captura de energía vibratoria no es nueva, pero el interés ha crecido enormemente en los últimos años y se prevé que pueda ser una forma de lidiar con el problema del abastecimiento energético a largo plazo. Y, ahora que ha ganado el concurso, la joven quiere desarrollar un prototipo más complejo que pueda llegarse a comercializar. Un problema global Mendu recuerda que tuvo la idea durante su último viaje a India. “Cada verano, mi familia, que es india, tiene que convivir con persistentes apagones”, dijo Mendu. “Para mí, personalmente, eso significa no tener acceso (temporalmente) al aire acondicionado o a la electricidad. Pero para más de un quinto de la población mundial la oscuridades una realidad permanente”. Sin electricidad ni agua: la precariedad de Calero, la isla por la que Costa Rica y Nicaragua se enfrentaron por 5 años La muchacha dice que “quería desarrollar un sistema de iluminación que pudiera solucionar ese problema”. “Lo que realmente me motivó a participar en este concurso fue la idea de crear un aparato que pudiera impactar al mundo“, señala. Y ese es precisamente el espíritu de la competición, según declaró Bill Goodwyn, el director ejecutivo de Discovery Education, la organización detrás del proyecto. “Cada año, este concurso nos recuerda la inspiradora ingenuidad que resulta cuando capacitamos a nuestra generación más joven para aplicar la ciencia, el pensamiento crítico y la creatividad para resolver problemas del mundo real“, dijo Goodwyn. Mendu compitió con otros nueve finalistas que pusieron de manifiesto cómo el talento joven puede cambiar el mundo. Entre los proyectos participantes había bacterias que generan energía, un sensor para ayudar a personas con discapacidades físicas, un simulador de reanimación cardiopulmonar y un aparato para controlar la polución. Fuente: http://www.bbc.com/mundo/


